Thursday, April 20, 2006

Memoria olfativa. Marque con X.

A continuación se le presenta un lugar y varias opciones de olor. Escoja la opcion que corresponda con el lugar mencionando y marquela con una equis (x).

1- En la Avenida Central, en el cruce de la antigua monumental (donde esta la pantalla) huele nauseabundamente a:

( )rosas
( )clavo de olor
( )reina de la noche
( )pura cloaca

2-En toda la pared de la parte trasera de la catedral, el olor insoportable procede de:

( )algun pollo frito cercano
( )una venta de pizzas (a 500 el slice)
( ) hamburguesas junior
( )orines de borracho

3-En la calle de la amargura ya no se aguanta el olor a:

( )mierda
( )cloaca
( )basura
( ) todas las anteriores

4- Lero, lero, la liga huele:

( )bien
( )rico
( )sabroso
( ) Ninguna de las anteriores. Especifique:______

5 Comments:

Anonymous Anonymous said...

jaja. un par de esos sitios no se pierden por olor.

q aburrido, pero poniéndome serio: siempre me ha encantado la sensación de recordar algo a partir de un olor.
siempre nos pasa con alguna pieza, o con un lugar o una imagen, de pronto nos recuerda algo. pero cuando sucede con un olor, es fenomenal.

sigue mi nariz...

4:17 PM  
Blogger 1ui5 said...

estamos tan acostumbrados a respirar,que se nos olvida oler.

de hecho es buenisimo cuando un olor nos recuerda algo(uien).

hay que recordarlo: respiramos por deber, pero olfateamos por placer.

4:24 PM  
Blogger 1ui5 said...

jaja

de hecho solo un error tuviste...pero bueno, ese error se les disculpa a los liguistas.

4:26 PM  
Anonymous Anonymous said...

bueno, no siempre olfateamos por placer.
te puedo dar un par de nauseabundos ejemplos.

;)

7:08 PM  
Blogger 1ui5 said...

por ej: / :

...En la época que nos ocupa reinaba en las ciudades un hedor apenas concebible para el hombre moderno. Las calles apestaban a estiércol, los patios interiores apestaban a orina, los huecos de las escaleras apestaban a madera podrida y excrementos de rata; las cocinas, a col podrida y grasa de carnero; los aposentos sin ventilación apestaban a polvo enmohecido; los dormitorios, a sábanas grasientas, a edredones húmedos y al penetrante olor dulzón de los orinales...

Patrick Süskind,
El Pefrume.

11:45 AM  

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